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CANTO A LA RESISTENCIA MAYA / 277

ANA MATÍAS RENDÓN / Revista Sinfín, número 31, mayo de 2020

Pedro Uc Be destaca por su activismo en favor del territorio maya y su escritura que recoge la Palabra de la resistencia. Tal como lo indica el autor en su ensayo “Siipkuus es el canto de la resistencia maya en cada atardecer”, publicado en la página de Chilam Balam (2017), Siipkuuts es el canto de resistencia. ¿Qué o quién es Siipkuuts? El autor responde: “Cuentan los abuelos de nuestros abuelos que los Yuumo’ob más primeros crearon al k’aykuuts, pero esta noble ave necesitaba tener un guardián, entonces para no desentonar con la lógica maya los dioses crearon al Siipkuuts”.

Para los profanos, como lo dice Uc Be, puede parecernos “un simple pavo mítico”, pero, para el pueblo maya:

“El Siipkuuts es semilla de nuestra fe, es reafirmación de nuestras creencias, es la verdad de nuestros dioses, es preservación de nuestro ver, oír, hablar y sentir, es lo que otros llaman cultura, es la motivación de nuestros ritos, es lenguaje sin ser lengua, es corazón del cielo y corazón de la tierra, Yuum K’áax incomprendido y satanizado por el ts’uul; es origen de nuestro origen sin ser de otros origen, metáfora de nuestra lengua y lenguaje maya, de nuestro pensamiento sentido y nuestro sentimiento pensado. Siipkuuts, canto musical en resistencia”.

El Canto del Siipkuuts es una plaqueta con doce cantos en edición bilingüe maya-español en el que se redime la voz del ser sagrado, en donde a través de la poesía escrita se rescata el origen y se plasma la lucha contemporánea. Esta segunda edición, por la Editorial Eugenia, tiene un prólogo del joven poeta Janil Uc Tun, titulado “De seres y sombras”, en el cual nos explica la dualidad entre la armonía maya y el caos producido por las sombras, una vez que se rompe la concordia. Janil Uc explica que la escritura del poeta maya es “como un milpero que cuida cada una de las etapas del maíz, desde su ser semilla hasta la primicia, Pedro Uc Be nos da una muestra de su potencia poética”. Así es, en la poesía de Uc Be podemos encontrar al conocedor del campo, al que camina entre la milpa, pues como el mismo autor lo menciona en su ensayo “La escritura maya: una muestra de creación. Uts’íibil ts’íib” (Sinfín, 2016): “escribir es caminar y viceversa, es dejar huella, es hacer historia”. El Canto del Siipkuuts empieza, precisamente, con el canto de Siipkuuts:

u aj kalaanech u kuxtal k’aykuutso’ob, ka majántik u chi’Yuum Cecilio Chi’ uti’al a k’aayu paaxilech u yutsil u xikin Yuum K’áax, le beetik junyuul ch’a’apachta’anech kiinsbil tumen ts’uul. guardián y defensa, tu táctica y estrategia, coraje y valentía, tu profecía en Cecilio Chi’ belleza y ritmo, tu sonido en el corazón de Yuum K’aax, por eso el ts’uul te ha desaparecido como un 43.

Los simbolismos en un breve fragmento del poema nos abren nuevos panoramas, no sólo en el ámbito poético, sino también en la historia, la cultura y la filosofía. La relación entre k’aykuuts, Siipkuuts y Yuum K’aax se nos va revelando. La palabra se desenvuelve a través del guardián y defensor del Mayab, del canto de la resistencia, del ave de múltiples colores, y nos muestra su corazón. La resistencia es ayer y hoy. La figura de Cecilio Chi, capitán maya en la Guerra de Castas del siglo XIX, se hace nuevamente presente. Cómo no recordar aquellas palabras dichas junto a otro ilustre combativo, Jacinto Pat, en carta dirigida a Domingo Bacelis y José Dolores Pasos, el 19 de febrero de 1848, que nos muestran la batalla que se ha librado por siglos: “Porque si os estamos matando ahora, vosotros primero nos mostrasteis el camino”, es la respuesta a una misiva en la cual exigen a los mayas que bajen las armas por el bien del progreso, ¿acaso tan diferentes a lo que enfrentan a la actualidad? Luego, en remate al fragmento, el poeta nos avienta a lo brutal de la actualidad, a las desapariciones que se viven en el país, a la infamia de los 43 jóvenes secuestrados de Ayotzinapa, para mostrar un símil con la desaparición de la memoria, porque si Siipkuuts es el guardián de la Palabra, el canto de la resistencia es, por lo tanto, el guardián de la memoria.

Pedro Uc es profesor de Historia y Filosofía, conoce bien los vericuetos académicos del conocimiento disciplinar, pero su sabiduría no se concreta en los libros sino en la oralidad. Es la Historia, Filosofía y Poesía de su cultura maya lo que nos transmite, de ahí que su lectura nos sea enriquecedora, que debamos hacerla con detenimiento, cuidando cada uno de los elementos que nos transmite; si tan sólo un breve fragmento del primer canto de Siipkuuts nos conduce por una serie de simbolismos, ¿qué más podría depararnos este bello texto? Definitivamente, nos comparte la sabiduría desde el Mayab.

Existe en este poemario una serie de poemas que nos seducen por su belleza y nos incitan a la reflexión, a pensar a través de la palabra maya, nuestro mundo, porque no podemos ser ajenos al ataque que sufre una cultura sin pensar en la nuestra. Finalmente, el canto de Siipkuuts se aleja de la tristeza para inocularnos valor, para entender que la lucha debe continuar. En el poema “k’i’inam / Dolor”, versa lo siguiente:

Tun k’i’inam in k’ajlay tumen istikia’ u k’a’ajal u yiik’, Tóoka’ab u áanalte’ tumen le ts’uulo’.

[…] Tun k’i’inam in k’aay tumen sajak u yu’uba’al, ba’ale’ min tu náakal u k’i’inamtu xikin Yuumtsilo’ob.

Se duele la memoria de haber perdido en el olvido su recuerdo, sus códices, fue víctima del fuego extraño.

[…] Se duele el canto de haber perdido en el miedo su alegría, pero empieza a perturbar los oídos rebeldes de Yuumtsil.

La literatura maya, así, en general, tiende a ser un reflejo de las diversas luchas bélicas que han tenido que sobrellevar por siglos frente al Ts’uul (o Dzul, como antiguamente se registró el nombre). Esta cultura es de guerreros, y tal vez sea lo que los condena ante una sociedad que ha aprendido a ser “pacífica” en el discurso, pero que apela a la aniquilación de los pueblos. Es, sin más, una cultura valiente, en tiempos en donde se requiere de valor para enfrentar el mundo globalizado. Por ello, la poesía de Pedro Uc Be es un aliento de reflexión y participación para cambiar el rumbo de nuestros modos de vida, aun cuando se pretenda invisibilizar los conflictos, pues como nos versa en “In moots / Mi raíz”: “tu invisibilidad no asegura tu extinción”.

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Pedro Uc Be, U K’aay Siipkuuts / El Canto del Siipkuuts, Editorial Eugenia, Mérida, 2019.

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