Ahora podrían parecer lejanos esos momentos en lo que una enfermedad sin nombre afectaba a ciertos sectores de la sociedad, en específico, los hombres homosexuales o las mujeres trans, a quienes, por el simple hecho de serlo, se les asociaba directamente a ese trastorno de la salud.

Un padecimiento al cual se le había nombrado “cáncer rosa”, “cáncer gay” o “síndrome de inmunodeficiencia gay” estaba azotando varias ciudades de Estados Unidos a comienzos de la década de loas 80, momento en que su diagnóstico equivalía a la muerte debido a la falta de un tratamiento médico, pero también al desinterés de las autoridades por comenzar a tomar cartas en el asunto.

La ciudad de los vientos, como es conocida Chicago, en las praderas centrales de Estados Unidos, también sufrió de la incertidumbre provocada por un virus recién identificado y cuyas consecuencias son el debilitamiento total del sistema inmunológico. En medio de esa crisis, un grupo de amigos de los circuitos gay vive en carne propia la situación. Encarnan el dolor de saber de la muerte de alguno de sus integrantes y la imposibilidad de asistir a su funeral como consecuencia de los prejuicios a su alrededor, o de la urgencia constante de la aplicación de pruebas de detección para establecer o no un plan de vida y pensar o no en un futuro, o más complejo aún, en un mañana.

Pero dicho dolor también encarna en una movilización sin precedentes de personas cuyo espectro público y político no solía estar en un primer plano. Grupos de personas afectadas por el virus y quienes simpatizaban con ellas tejieron redes de resiliencia, amor y compañía para enfrentar la situación y no perder la esperanza de un cambio, de un legado, de un aliento a pesar de estarse dando los últimos suspiros.

Ubicando la trama de la irrupción del VIH en una ciudad fuera de los focos de atención, Rebecca Makkai realiza un ejercicio de desdoblamiento entre quienes estuvieron cerca de la situación y son herederos de esa memoria colectiva y quienes sucumbieron en esos instantes críticos a través de Los Optimistas (Sexto Piso, 2023), novela cuyo trasfondo es la resignificación de la vida y de la muerte y la crítica a una sociedad global moralizante, resquebrajada por el optimismo ferviente de quienes eran afectados por la situación.